Esta es la historia de Felipe, un muchacho normal, con una vida normal, muy trabajador y enamorado de su novia Isabel, con la que llevaba saliendo un año.
Un día volvió de trabajar del extranjero su amigo Manuel, el típico muchacho alegre extrovertido, que no se tomaba nada en serio.
Felipe se alegró de la vuelta de su amigo, y quedaron para cenar y tomar unas copas luego, acompañado de Isabel.
Al llegar se dieron un abrazo muy fuerte, de hermanos, tan fuerte era su lazo de amistad, y acto seguido le presento orgulloso a su novia.
Desde el primer momento nuestro protagonista, observo que su amigo no apartaba los ojos de Isabel, pendiente de ella en todo momento, aprovechando que ella buscaba un empleo, él se ofreció a ayudarla , y conseguir entrevistas de trabajo, ya que tenia contactos que le podrían dar un trabajo.
A raíz de esta propuesta Manuel la fue acompañando a varias entrevistas, hasta que en una de ellas fue contratada.
Isabel en este momento vio en el amigo de su novio, a un héroe que la había salvado de una situación desesperada, buscaba empleo desde que conoció a su novio sin éxito.
Manuel paso a ser como un príncipe azul ,en su impresión que tuvo de la situación, un ser especial que había sido el único en salvarla de un calvario, poco a poco esa visión se fue transformando en atracción, y luego, viéndose a escondidadas, en amor.
Felipe ignorante de todo lo que estaba sucediendo, un día, en el trabajo, recibió una llamada de su novia, en que instaba verse urgentemente esa noche, que tenía que hablar con él.
Notó la voz de Isabel extraña, distante, preocupada pero lo atribuyó al estress de los últimos días, y la perspectiva de un nuevo trabajo, sin sospechar lo que se avecinaba.
Por la noche Felipe la recogió con su coche, y ella le pidió que fueran a sentarse en un parque, una vez llegaron y se sentaron en un banco, ella le expreso sus sentimientos de los últimos días, para finalmente decirle que rompía su compromiso con él, debido a que se había enamorado de Manuel.
Sintió como si su corazón se rompiera en dos, como si todo alrededor se resquebrajara, y como persona noble que era, con un dolor indescriptible afrontó y acepto la situación, y le deseo buena suerte y felicidad, Isabel fue consciente del daño que hacia, y no quería marcharse, viéndole tan abatido, pero él dándole un beso a la mejilla de pidió que se marchase, que estaba bien, pero deseaba estar solo.
Paso el tiempo, supo de la boda de Isabel y Manuel, y otra vez volvió a sentir ese peso en el corazón que no lo había abandonado, desde la ruptura.
Un día la encontró por la calle, se saludaron, se abrazaron, porque el cariño de Isabel e incluso el rescoldo de amor hacia Felipe no había muerto,cuando se quito las gafas de sol, vio un enorme moratón en un ojo, al preguntarle le dijo que se había dado un golpe con la puerta.
Esta explicación lo le convenció, parecía mas un golpe por una bofetada que un golpe casual con una puerta, pero enseguida aparto esa idea de la cabeza, no se imaginaba a su amigo Manuel capaz de semejante acto.
Lo último que supo de ella es que habian tenido un hijo,y se lo dijo a traves de una llamada de teléfono.
Pasado un tiempo, amigos comunes le fueron llamando y contándole que habían visto a su ex con moratones y golpes en la cara, brazos, piernas.
Un día recibió, pasados unos cinco años, una llamada inquietante de Isabel, que llorando, empezó a hablar de una manera incoherente con palabras como.
-Perdóname, te hice daño.
-Me equivoque.
-Nunca te he olvidado, y si me pasa algo cuida de mi hijo.
-¿Que pasa Isabel? Me tienes preocupado, deja que te ayude, sospecho lo que pasa.
-Adiós Felipe, solo te pido la promesa sobre mi hijo.
Seguidamente colgó el teléfono, nuestro protagonista como un loco, cogió el coche y se dirigió al domicilio donde sabia que vivían, temiendo lo peor.
Al llegar vio desde el balcón de su piso un niño pequeño pidiendo auxilio, y gritos desde el interior.
Sin dudarlo subió como un loco al piso, y con un empujón logró abrir la puerta dañándose el hombro.
Ante él vio un panorama dantesco, muebles tirados por el suelo, con diferentes objetos desparramados, producto de una pelea, y un reguero de sangre de una herida de Isabel, Manuel con un cuchillo en la mano, y en el balcón un niño acurrucado.
-Manuel ,para!!,que estás haciendo??
No solo no le hizo caso, sino que le ataco, produciéndole un corte, Felipe estaba en inferioridad de condiciones,un hombro dislocado, y una herida, comprendió que no tenía fuerzas para una lucha, entonces cogió la pata de una silla rota, y se abalanzó sobre Manuel, y antes de golpearle recibió dos cuchilladas, pero consiguió darle dos golpes en la cabeza antes de perder el conocimiento.
Despertó al cabo de un día, un una UCI del hospital, después de una operación de urgencia, encontrándose con dos maravillosos ojos llenos de lagrimas y de ternura.
-Como estas, cariño?
-Parece que me ha pasado un tren por encima.
-Recibistes dos puñaladas, pero no te ha afectado ningún órgano vital.
-Y tu?, recuerdo que estabas herida, y el niño? Que ha sucedido con Manuel?
- No te preocupes,mi amor,mi herida es superficial, el niño está bien, y Manuel bajo disposición judicial, y probablemente una larga temporada en la carcel. Felipe podrás perdonarme, me di cuenta que todo fue una ilusión, y que el único amor has sido y seras siempre tú mi vida,tu si que eres un héroe, y sobre todo un hombre como dios manda.
-Nunca te he olvidado, y también eres mi único y verdadero amor, tenemos otra oportunidad, Isabel.
Esta historia llega a su fin, no sin antes contar que el resto de su vida Isabel, Felipe y el niño, al que acogió como hijo propio, consiguieron la felicidad, tanto tiempo perdida.
